1. Tomar las pechugas y con un cuchillo afilado realizarle 4 o 5 cortes (dependiendo el tamaño). Tener cuidado de no cortarla del todo. Poner un poco de jugo de limón y aceite de oliva, con sal, pimienta y pimentón y esparcir bien en todos los cortes.
2. Cortar en lonjas la mozzarella y envolver cada una con una feta de jamón.
3. Rellenar cada corte del pollo con la mozzarella envuelta en jamón.
4. Colocar un papel manteca en la base del canasto, disponer las pechugas ahí dentro, rociar con un poco más de aceite de oliva y el jugo de limón.
5. Cocinar a 200° por 20 minutos o función pollo, dependiendo del tamaño de la pechuga.